Chapter Forty one (Mandy)
Joel había ido hacia la sala donde es celebraba la fiesta para buscarnos, no encontraba a Diana por ningún sitio y quizá nosotros sabíamos algo, aunque no era así. Bueno yo sabía poco más que él, únicamente que se había quedado en aquella habítación con Seb y Mark, pero ya había pasado bastante tiempo desde que los dejé allí. Le conté la mitad de las cosas, no podía contarle todo, y me obligó a llevarle hasta aquella habitación.
Cuando estabamos enfrente de la puerta yo no quería entrar pero él insistía en hacerlo a toda costa. Benji, por el contrario, prefería permanecer al margen, creo que ya estaba sospechando algo de lo que podía estar pasando.
Joel decidió entrar, pero poco después de encontrar el valor suficiente para hacerlo se llevó la decepción de encontrar todo vacío, no había nadie, estaba todo tranquilo, como si nada hubiese pasado. Nosotros entramos siguiéndole y al no encontrar nada, al menos yo, me sorprendí. Benji sugirió el baño que había en la habitación, la luz seguía encendida, y según él tenía que haber alguien cerca.
Nuevamente volvió a armarse de valor para abrir la puerta y así lo hizo. Lo que no esperaba era encontrarse con lo que había en el interior. Nada mas abrir la puerta y entrar un poco, retrocedió de nuevo hacia la habitación.
En el baño estaban Mark y Diana. Al ver a él sólo con los boxers y a ella en el jacuzzi, instintivamente Joel agarró a Mark y lo llevó a la habitación con intención de pelearse con él, por suerte estaba Benji para intentar detenerlos. Mientras yo había ido hasta donde estaba Diana, se encontraba mareada, a punto de desmayarse, aunque no tardó apenas cinco minutos en hacerlo.
Intentaba despertarla sin ningún éxito. La única solución que se me ocurría en aquel momento era llevarla al hospital. Como pude le saqué del agua y la enfunde en un albornoz que había allí cerca. Volví a la habitación y le pedí a Benji que me ayudara a llevarla, yo en ese estado no podía sola. La cogío y yo como pude separé a Joel y a Mark, para llevarme al primero hacia el hospital.
Una vez allí estuvimos esperando los tres a que nos digeran algo pero no venía nadie. Habían pasado ya más de una hora y no sabíamos nada. Cansados de esperar, Benji fue a preguntar por ella y le permitieron pasar a verla, en ese momento quizá él era el más adecuado. Yo me quedé con Joel esperando. A la media hora, más o menos, vino una enfermera para decirnos que podíamos pasar a la habitación.
Cuando estabamos enfrente de la puerta yo no quería entrar pero él insistía en hacerlo a toda costa. Benji, por el contrario, prefería permanecer al margen, creo que ya estaba sospechando algo de lo que podía estar pasando.
Joel decidió entrar, pero poco después de encontrar el valor suficiente para hacerlo se llevó la decepción de encontrar todo vacío, no había nadie, estaba todo tranquilo, como si nada hubiese pasado. Nosotros entramos siguiéndole y al no encontrar nada, al menos yo, me sorprendí. Benji sugirió el baño que había en la habitación, la luz seguía encendida, y según él tenía que haber alguien cerca.
Nuevamente volvió a armarse de valor para abrir la puerta y así lo hizo. Lo que no esperaba era encontrarse con lo que había en el interior. Nada mas abrir la puerta y entrar un poco, retrocedió de nuevo hacia la habitación.
En el baño estaban Mark y Diana. Al ver a él sólo con los boxers y a ella en el jacuzzi, instintivamente Joel agarró a Mark y lo llevó a la habitación con intención de pelearse con él, por suerte estaba Benji para intentar detenerlos. Mientras yo había ido hasta donde estaba Diana, se encontraba mareada, a punto de desmayarse, aunque no tardó apenas cinco minutos en hacerlo.
Intentaba despertarla sin ningún éxito. La única solución que se me ocurría en aquel momento era llevarla al hospital. Como pude le saqué del agua y la enfunde en un albornoz que había allí cerca. Volví a la habitación y le pedí a Benji que me ayudara a llevarla, yo en ese estado no podía sola. La cogío y yo como pude separé a Joel y a Mark, para llevarme al primero hacia el hospital.
Una vez allí estuvimos esperando los tres a que nos digeran algo pero no venía nadie. Habían pasado ya más de una hora y no sabíamos nada. Cansados de esperar, Benji fue a preguntar por ella y le permitieron pasar a verla, en ese momento quizá él era el más adecuado. Yo me quedé con Joel esperando. A la media hora, más o menos, vino una enfermera para decirnos que podíamos pasar a la habitación.
<< Home